Breve panorámica
Carolina del Norte está considerada la cuna del movimiento por la justicia medioambiental. Aunque nuestro estado ha experimentado algunos avances, Carolina del Norte sigue presentando disparidades en materia de salud pública y calidad ambiental. NC Conservation Network trabaja para acabar con esas disparidades haciendo frente a las amenazas que se ciernen sobre las comunidades, como la gestión de residuos animales, el vertido de cenizas de carbón y las infraestructuras de gas natural.
Impactos dispares
Un informe de 2019 de NC Conservation Network ofrece una visión de cómo afloran algunas de estas disparidades. El Environmental Justice Screen de la US EPA, una herramienta cartográfica en línea, incluye un índice demográfico que clasifica todos los más de 6.000 bloques censales de Carolina del Norte en función de las poblaciones de bajos ingresos y de raza minoritaria. La distribución de estos tramos de "justicia ambiental" tiene una leve correlación positiva con la proximidad a fuentes de tóxicos respiratorios, tráfico de vehículos pesados y lugares de almacenamiento y eliminación de residuos peligrosos, lo que implica que los residentes de estos tramos son algo más propensos a estar expuestos a estos riesgos que la población general. Además, un análisis de la EPA estadounidense de 2014 reveló que las personas de color en Carolina del Norte tienen más probabilidades que los blancos de vivir a menos de un kilómetro y medio de una instalación que libera contaminación tóxica en el medio ambiente local. Por último, la distribución de la ganadería porcina industrial se solapa con las zonas EJ en la llanura costera del sur.
Más sobre equidad
El trabajo de NC Conservation Networken cuestiones de justicia medioambiental se alinea directamente con nuestro compromiso organizativo más amplio de promover la equidad en nuestro estado.